06 abril 2011

IKER URREIZTI, TODO UN EJEMPLO A SEGUIR

LA CARTA DE IKER.
Reproducimos aquí la carta de Iker, que nos ha emocionado dejándonos un nudo en nuestras gargantas:
A TODA LA FAMILIA AURINEGRA
¡BUENOS DÍAS A TODOS!
Lo primero, agradecer la presencia de todos vosotros hoy, aquí.
El motivo de la convocatoria no es más que la de daros la noticia de que al final de esta temporada dejaré de ser jugador profesional de baloncesto.
La verdad es que en los últimos días no sabía cómo podría decirlo pero para eso están los buenos amigos como Chagoyen: Tu di… “hasta aquí hemos llegado y ya está”.
La razón por la que hemos decidido comentarlo públicamente hoy, es porque creo que el fantástico equipo que tenemos hoy aquí, merece toda la atención y el apoyo posible a partir de ahora, de cara a unos play off que seguro va a ilusionar a toda la parroquia aurinegra, tanto como a nosotros.
Aprovecho para daros las gracias a vosotros los periodistas, por el fantástico trato que he recibido durante estos cuatro años, agradezco especialmente a los profesionales que no anteponen la noticia a las personas. Doy fe de ello, gracias y enhorabuena por el fantástico trabajo que realizáis.
Sería complicado, más bien imposible, agradecer a tantas y tantas personas que me han acompañado en estos 30 años de baloncesto, (16 como profesional y 14 en categorías inferiores).
De todas formas me vais a permitir algunas reflexiones que hasta ahora desde mi posición de jugador no he podido hacer.
Una sola pena me queda después de tantos años como profesional: no haber llegado a Tenerife, a La Laguna, más joven. De todas formas, no sé si sabré explicar lo que ha supuesto para mí, para nosotros, haber pasado estos fantásticos cuatro años con la familia aurinegra.
A la semana de haber aterrizado en el Ríos Tejera llamé a mi hermano y le dije textualmente: “Hermano, me han dicho esta semana que he hecho algo bien más veces que en toda mi carrera junta”.
Gracias a Alejandro, y cuando digo Alejandro me refiero a todo su equipo, Israel, Óscar, Airam, Eliseo, Conrado, Gustavo, Luis, Dani, por enseñarme que existe otra forma de ver y trabajar el baloncesto profesional, que el dar el cien por cien, que el éxito y las victorias no están reñidas con disfrutar y con el respeto mutuo. Un entrenador que se gana el respeto sin tener que gritar, insultar, que saca de sus jugadores lo mejor, merece para mí el mayor de los elogios.
Quiero agradecer a Aniano y a todo su equipo (Belén, Marcos, Federico, Amalia…) su forma de ser y de actuar. No he conocido gerente que esté al lado de sus jugadores en todas, absolutamente todas las derrotas del equipo, sin girar la cara ante los malos momentos. Creedme, eso no es lo habitual.
Gracias a Félix, Cacho, Francis, Guillermo, Paco, Juan Pedro, Carbajo, Benigno… Recuerdo a Benigno trayéndole a mi mujer un hermoso ramo de flores y una gran sonrisa por el nacimiento de mi pequeña lagunera, Noa.
Nunca he visto tanta pasión y buen hacer desinteresado en un grupo de amigos por y para el bien del Canarias. Y quiero decirle a la familia aurinegra que cuiden de ellos porque son el corazón de este Canarias que tanto nos ha hecho disfrutar.
A la Fiebre Amarilla, a la gran Peña San Benito, a los Pollos Amarillos, a todos los padres y madres que llevan a los niños a los partidos, a todos los aficionados aurinegros, a Kiko, Tati, Ruth, Cande, Sheyla y tantos y tantos amigos… He disfrutado cada de una de nuestras victorias como si de un ascenso se tratara. Nos han demostrado todo su cariño en todo momento.
Sois una afición especial. Jamás podré olvidar el último minuto y medio de la primera temporada en el Ríos Tejera: play off contra el Breogán, nos eliminaban al término del partido, 14 abajo y el pabellón entero de pie aplaudiendo una temporada inolvidable. Los pelos como escarpias.
Manténganse unidos, positivos y constructivos, renueven la ilusión para que la Fiebre Amarilla pueda seguir contagiándose.
Quiero dar también un ánimo especial a Don Piña y su familia, aurinegro hasta la medula que está luchando contra la enfermedad para volver al pabellón a animar.
A todos mis compañeros, todos sabéis que podría olvidar alguno de vuestros nombres, pero para eso he traído la chuleta, a Richi, al abuelito Nacho, Mike, David, Fotis, Victor, el gran Chago, Albert, Jaime, Romén , David. A todos mis antiguos compañeros, Airam, Fari, Román etc… A mis amigos, antiguos entrenadores, a Enrique, a Sama… No tengo ni idea de que podría deciros más que gracias.
Y termino por supuesto agradeciendo a las personas que más quiero en el mundo, a las que están, han estado y estarán siempre a mi lado: Mari, Noa, Andoni, a Yolanda, mi madre, que todavía no duerme hasta que le doy el resultado del partido. A Nora, Yoli, Ane, Kokolo, Mikel, Mikel2, Eñaut, Joane, Aritz, Intza, txikis, Isabel, Juanita, Jose Antonio, Isa, Félix.
Tenía 10 años cuando ganábamos 58-0 al Don Bosco en el descanso. Mi padre, enfadado, nos dijo que dejáramos de presionar, y que practicáramos el bote con la izquierda. No le hicimos caso. Ganamos 128-0. Vi a mi padre decepcionado después de ver ganar y meter 28 puntos a su hijo. Tiempo después lo entendí y hoy espero que el “el Aita” esté sonriendo por ver a su hijo dejar de ser Iker para ser el padre de…
Llegamos a la Laguna a trabajar, aquí nos hemos sentido como en casa y nos vamos, con el corazón para siempre negro y amarillo.

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